
Capacidad: 15-22 plazas
Borreda (Berguedá), Barcelona
La Cordillera de los Pirineos se encuentra al norte de la Península Ibérica, haciendo de frontera natural entre Francia y España. El tramo de cordillera que queda dentro de la comunidad de Cataluña, conocido como el Pirineo catalán, se extiende entre las provincias de Lleida i Girona.
Se trata de un espacio de una gran belleza, un paraíso para los amantes de la montaña, de los paisajes impactantes y, en general, para todos aquéllos a quienes les entusiasme la naturaleza.
Una de las zonas más carismáticas del Pirineo catalán lo constituye el Parque Nacional de Aigüestortes i Llac de Sant Maurici, ubicado en la provincia de Lleida. Es un espacio protegido, con más de 250 lagos en cuyas aguas cristalinas se reflejan las majestuosas cumbres que lo rodean. El de Sant Maurici es el más emblemático de todos ellos, ubicado a más de 1900 metros de altitud sobre el nivel del mar y con sus 1100 metros de longitud. Junto a él, y reflejándose en sus frías aguas, se encuentra la montaña llamada “Els Encantats”, formando ambos un conjunto impresionante.
Dentro del Parque encontramos varios servicios, como visitas guiadas, observatorios de fauna, servicios, paneles interpretativos, material divulgativo, itinerarios señalizados, recorridos adaptados para personas con problemas de movilidad, refugios, e incluso, dentro de éstos, restaurante y cafetería.
También cabe destacar el Parque Natural del Cadí-Moixeró, que no sólo dispone también de una gran belleza paisajística sino también de una gran importancia tanto geológica como por su fauna y su flora. Sobresale la sierra del Cadí, además del Macizo del Pedraforca, una cumbre emblemática para el excursionismo catalán.
Otra de las zonas que no se deben dejar de visitar del Pirineo catalán es el Valle de Arán, situado en unos escenarios maravillosos, con sus majestuosas cimas y sus bonitos pueblos, todos ellos con sus techos de pizarra y la típica arquitectura propia de la zona a base de madera y piedra. Su capital es Vielha e Mijarán, una población con un gran encanto por la que discurre pacíficamente el río Garona.
Cabe destacar en este punto, el prestigio de los restaurantes y cocineros del valle, locales de buena cocina regional donde se pueden degustar los platos tradicionales de la comarca, como su famosa olla aranesa.
Los amantes del arte también encontrarán un motivo más para visitar este hermoso valle, ya que en toda su extensión encontrará multitud de muestras de la arquitectura y arte románico, la mayoría pertenecientes a los siglos XII y XIII: ermitas, monasterios, iglesias, capillas, tallas y similares.
Otro de los atractivos del Pirineo catalán son sus estaciones de esquí, como la de Baqueira-Beret, La Molina o Boí-Taüll.