
Capacidad: 2-12 plazas
Camprodón, Girona
La Garrotxa es una bella comarca catalana, situada al nordeste de la provincia de Girona, que se encuentra dividida en dos subcomarcas, la Baja Garrotxa, caracterizada por su territorio húmedo y con valles situados en verdes llanuras, y la Alta Garrotxa, mucho más abrupta, en la que destacan sus riscos y acantilados y sus valles mucho más profundos.
Es una tierra que destaca por su abundante vegetación, muy frondosa debido a otra de sus características, su abundancia de agua, en forma de numerosos arroyos y manantiales. Ello, con el alto índice de lluvias que se registran en la comarca, la convierten en un lugar de una gran riqueza en lo que se refiere a su flora y su fauna.
Dentro de la comarca se encuentra el Parque Natural de la Zona Volcánica de La Garrotxa, ya que la comarca es tierra volcánica, constituyendo de hecho el mejor paisaje de volcanes de toda la península, estando considerado además como uno de los mejores del continente europeo.
La zona volcánica, dentro de la cual se han contabilizado unos 40 conos volcánicos en muy buen estado de conservación, se concentra en el espacio conocido como Serralada Transversal, encontrándose el principal foco en la llanura en la que se asienta la localidad de Olot, capital de la comarca. De hecho, unos 25 km. cuadrados de dicha llanura están ocupados por un campo de lava.
Se trata de una comarca ideal para la práctica del turismo rural, en la que los amantes del senderismo encontrarán una gran variedad de senderos que conforman la Red Intinnerària, con muy buenas señalizaciones que les ayudarán a descubrir los más bellos rincones que encierra La Garrotxa.
La zona es además uno de los mejores espacios de la comunidad para la práctica del cicloturismo, con dos vías para ello que se encuentran enlazadas en Olot, la Vía Verde del Ferro y la Vía Verde del Carrilet, conduciéndonos esta última hasta la misma capital provincial, la ciudad de Girona.
En la comarca se encuentran localidades muy interesantes para visitar, como el conjunto arquitectónico de Besalú, uno de los conjuntos medievales mejor conservados de nuestro país, donde al pasear por sus calles nos parecerá que el tiempo ha retrocedido siglos. En ella podremos ver, además de su atractivo casco histórico, obras como su emblemático puente románico, que mide más de 100 metros de largo y por debajo del cual discurre el río Fluvià, todo un símbolo para la localidad. O como su Monasterio de San Pedro, del cual actualmente sólo queda la iglesia, que data del siglo X.
La gastronomía de La Garrotxa se basa especialmente en la carne, tanto de ganadería y corral como de caza mayor y menor, que se combinan con los productos de sus huertas. Con ellas se elaboran platos como el estofado de jabalí, la butifarra con alubias, el pato con peras, el fricandó de ternera, la escudella con carne de olla o las famosas patatas de Olot, rellenas de carne.
Destacan productos como las judías de Santa Pau o las galletas de Castellfollit de la Roca. Los embutidos son de una gran calidad, sobresaliendo el salchichón, el fuet, la bayona o el bull, tanto blanco como negro.