
Capacidad: 2-12 plazas
Aldeadávila de la Ribera, Salamanca
Los Arribes del Duero, situados en la provincia de Salamanca y parte de Zamora, constituyen sin lugar a dudas uno de los más bellos lugares de toda la comunidad castellano leonesa, así como uno de los paisajes más impactantes y majestuosos del país.
Se trata de un espacio protegido, declarado Parque Natural, formado por unos cañones de una gran espectacularidad, a través de los cuales discurre el río Duero, encajonado entre altas paredes rocosas, en un recorrido de unos 100 kilómetros de longitud. Allí, el tiempo y la erosión producida por las aguas del río han ido creando a lo largo de los años caprichosas formas en las paredes y rocas que el Duero encuentra a su paso, hasta formar un impresionante escenario.
A lo largo de estos 100 kilómetros que tiene el recorrido, el río hace la función de frontera natural con el vecino país portugués, recibiendo, al otro lado del mismo este espacio el nombre de Parque Natural del Duero Internacional.
El paisaje que se puede contemplar de los arribes es de los que sobrecoge, por su majestuosidad, y que nos hace sentir pequeños a su lado. El lugar desprende una atmósfera de grandeza y de soledad, difícil de describir.
En gran parte de su recorrido, es inaccesible por tierra, y seguramente gracias a ello podemos hablar hoy en día de la riqueza que encierra en cuanto a su fauna. con muchas especies autóctonas. Se han contabilizado hasta 200 especies diferentes, algunas de ellas difíciles de contemplar como el buitre leonado, el lobo, el gato montés, el águila real y muchos otros que han encontrado en los arribes un hábitat idóneo para ellos.
A pesar de su inaccesibilidad, podemos disfrutar de este espectáculo de diversas maneras, como usando alguno de los miradores que se encuentran a lo largo del recorrido, como el Mirador de Peña Redonda, situado en el municipio de Villardegua de la Ribera.
Hay también algunas zonas que, a pesar de no serlo, hacen igualmente la función de miradores, como puede ser el enclave en que se encuentra la ermita de la Virgen del Castillo, que ofrece una fantástica panorámica, o algunos puntos de otras localidades cercanas.
De todas maneras, existe la posibilidad, muy recomendable, de poder visitar las Arribes de manera completa, siguiendo el recorrido que hace el Duero por el Gran Cañón. Se trata de recorrerlo navegando a través de él, una experiencia única pero posible, ya que hay empresas que se dedican a ello. Se puede optar por hacer el recorrido de un tirón o hacerlo en varios días. Esta última opción es la más recomendable, ya que permite disfrutar mucho más de la belleza del lugar. Si nos decantamos por esta última opción, lo ideal es alojarse en alguna de las casas rurales que encontraremos en los alrededores de la zona.